CASTILLA 23 DE ABRIL

 


Somos un país en el que la recreación con los mitos, el ritual a la muerte y el permanente regodeo en la negación y la desgracia nos envuelve y sin darnos cuenta marca nuestro camino en forma negativa.

¿Y por qué todo esto? Muy sencillo por la permanente celebración de hitos históricos que pudieron cambiar nuestro destino y sin embargo fueron los que marcaron un futuro diferente al que muchos hubiéramos querido.

El 23 de Abril, próximo tendrá lugar la celebración, este año sin actos populares por la pandemia, pero sí con actos culturales y análisis diversos de lo que hace 500 años ocurrió en Villalar, Castilla que no León. Celebraremos la derrota de una sociedad libre desde su nacimiento, acostumbrada a decidir en común sus destinos y su sencillo día a día que no admitÍa la imposición  extranjera, la opresión absoluta. Son 500 años de una victoria ajena que marcó la derrota mas larga jamás imaginada, porque con la muerte de las Comunidades, nació una nueva Castilla que, de ser libre paso a ser opresora, que, de defender sus leyes y normas libremente elegidas y dictadas, paso a ser considerada el rodillo de toda libertad hispánica.

Celebremos los 500 años de una derrota, o por el contrario utilicemos este aniversario para marcar bien claro quien, y quienes fueron los primeros oprimidos por el absolutismo llegado de fuera, por la imposición de lo nuestro no querida ni buscada, por que nuestra lengua se utilizase como arma demoledora contra otras libertades.

Villalar fue el primer paso atrás de un pueblo libre, como posteriormente lo sería el 11 de septiembre con la derrota de Barcelona frente a los Borbones centralizadores.

Hagamos valer ante tanto ataque a lo castellano y a Castilla, por los que se dicen defensores de todo pero no de todos, que Castilla necesita ser reconocida, revalorada y separada de cuantos se sirvieron de ella para sus propios fines.