CANSANCIO
¿Como empezar?, ¿qué es realmente
lo más importante, lo que atrae la atención del lector?, estas preguntas hasta
no hace mucho eran el día a día de cualquier “escribidor” en busca de tema, el
problema era la falta de material realmente interesante; hoy no, las mismas
preguntas chocan con distinta causa, el exceso.
Nos agobian cada día con multitud
de noticias, algunas veces solo informativas, la mayoría críticas, que en
nuestro entorno están en permanente ebullición, todas las políticas,
sanitarias, económicas, sociales….. todas de una importancia inquietante y a
las que nuestro cerebro solo puede responder de una manera: CANSANCIO; y
este llega a nosotros como un fogonazo que da sentido a momentos en los que la
lucidez de la palabra ha desaparecido, sin entender como es posible que con
tanto material nada salga de nuestro teclado tantas veces amigo y
asombrosamente negro en los últimos días. La calle bulle de gente como si nada
estuviera ocurriendo, con la alegría falsa que produce el no querer saber, pero
¿se sabe?, SÏ
Políticamente estamos ante una
crisis de Estado, en la que la aplicación de lo que la Justicia decida, tendrá
un decisivo resultado en política, un indulto, como ya tuvimos tantos, esta vez
pone a las dos Españas frente a frente y agresivas, no se sabe muy bien a quien
o quienes mueven los hilos de las decisiones presidenciales, lo que sí es
seguro es que si es necesaria una salida a un problema tan grave como Cataluña,
el primer resquicio de apertura del portón que nos separa esta en la aplicación
de algo reconocido y utilizado cuando ha interesado a unos y/u otros, el
indulto. Lo curioso es que, igual que no gusta a la oposición, tampoco gusta a
los interesados, quieren más, o querían, que ya con las ultimas declaraciones
no sabemos si el paso que posiblemente de el Gobierno sería suficiente para
calmar al menos esas aguas.
Pero la Justicia tiene más, y
todo de un enorme interés, el caso Kitchen, el Neurona, los papeles de…… Un
atosigamiento que termina en lo que ya decíamos: CANSANCIO
Y si queremos salir de temas farragosos, quizás no deberíamos olvidar que
estamos en plena pandemia. Los índices de contagios e ingresos suben y bajan (a
mi solo los muertos me preocupan) , la marcha de la vacunación parece que sí funciona, las competencias sanitarias mal transferidas a las Comunidades; todo,
todo eso nos lleva aunque no queramos a la manipulación económica hasta de la
muerte, sí, de la muerte, porque ni a las grandes Farmacéuticas les importa
nada mas que los ingentes ingresos que están consiguiendo, ni a los líderes de
occidente preocupa la situación de los países que económicamente no pueden
cortar la sangría a base de vacunas de precios imposibles, ni a nuestros políticos, por acercarnos al
problema, hay nada que les preocupe mas que la crisis de un país que nuevamente
cae en quiebra por la falta de infraestructuras industriales, dedicado
exclusivamente a ser lugar de recreo dependiente de que otras economías den a sus ciudadanos la posibilidad de gastar
en divertimentos, somos lo que en nuestra Andalucía llaman “curritos”, que es
tanto como decir vivir por y para el señorito que nos mantiene, tenerle
contento y que siga explotándonos por muchos años.
Y como es tiempo de crisis, hay
que aprovechar para echar carbón a la máquina.
Hace solo dos años se nos prometía
alcanzar el cielo con las manos, los grandes patrimonios, la vivienda, la
fiscalidad eran temas claramente modificables y, sobre todo, por lo que
propagandísticamente significaba, meter mano a las oligarquías centenarias, la
banca y las eléctricas. Dos años y el resultado ha sido como la explosión
incontrolada de una bomba casera. La Banca aproximadamente con 10.000 despidos
entre unos y otros, se asocia, funde, refunda y manipula; mientras eleva los
gastos directivos vergonzosamente, menosprecia a sus clientes con nuevas formas
de contacto y desprecia la labor de los que han centrado sus futuro en la
confianza de los buenos rendimientos de su empresa, y aquí tocamos, por añadir
más, la incapacidad de unos sindicatos que no saben su verdadera función y por
eso no la defiende,, simples muñecos manipulados en todos los campos que tocan.
Pero hay más.
Con la apabullante fuente de
información negativa, el Gobierno se nos asombra y “enfada” ni mas ni menos que
con las Eléctricas. Nos espabilan un día cualquiera con la nueva tarifación, y
parece que, en el Ministerio encargado de velar por el tema, no tenían ni idea
de lo que se venia encima. Se nos aconsejan horarios de consumo imposibles,
cambios de costumbres, formulas irrisorias de ahorro, pero ¿el bar de la
esquina como lo hace, como regula su consumo para que no sea su ruina?, da
igual, lo realmente importante según el
Ministerio de Igualdad es que ahora los
hombres aprendan a planchar, que sí que es cierto, no es un chascarrillo.
Mas mucho más hay que comentar,
pero los temas van de importantes a graves (¿podemos olvidar lo “bien” que
funciona Exteriores y la nueva diplomacia?), todos se amontonan. Menos mal que
a tanta metralla, el carácter mediterráneo siempre encuentra la vía de escape,
la vida sigue señores, disfrutemos mientras dure que mañana Dios dirá.
Y no sigo, me puede el CANSANCIO.